Durante dos décadas, el fabricante de pinturas Universal Colors ha producido una gran variedad de pinturas y revestimientos industriales en una pequeña fábrica de Callao (Perú). Con el paso del tiempo, la empresa ha ido eliminando de sus productos el plomo, una sustancia química tóxica. Sin embargo, dos tipos de pintura le resultaron particularmente problemáticos de modificar, entre ellos una pintura epoxi amarilla.
Por este motivo, Universal Colors se adhirió a un novedoso proyecto que ayuda a los pequeños fabricantes de pintura de los países en desarrollo a realizar pruebas piloto de reformulación de sus productos.
La iniciativa se enmarca en el Enfoque Estratégico para la Gestión de Productos Químicos a Nivel Internacional, un marco voluntario auspiciado por el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) y financiado por el Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF, por sus siglas en inglés).
En 2022, tres años después de unirse al programa, Universal Colors comenzó a producir pinturas con menos de 90 partes por millón de plomo, un valor límite reconocido internacionalmente como seguro.
"Hoy en día la gente es más consciente de su salud y de los productos con los que está en contacto", afirmó Erika Tirado Espinoza, directora de Desarrollo de Negocio de Universal Colors. "Nuestro equipo está orgulloso de formar parte de un proyecto tan importante".
Universal Colors es uno de los más de 20 fabricantes de pintura de Perú, Colombia, Ecuador, Nigeria, Jordania y China que han puesto a prueba la reformulación de su pintura en los últimos años.
La iniciativa forma parte de un esfuerzo mundial más amplio para reducir la cantidad de plomo en una serie de productos. En todo el mundo, la intoxicación por plomo causa la muerte de casi un millón de personas al año.
"Durante siglos, la humanidad ha luchado contra las consecuencias tóxicas del plomo", declaró Sheila Aggarwal-Khan, Directora de la División de Industria y Economía del PNUMA. "En los últimos años hemos avanzado mucho en la limitación de su uso, pero sigue siendo una grave amenaza en todo el mundo, especialmente en los países en desarrollo".
La exposición al plomo, incluso a niveles bajos, puede provocar daños graves e irreversibles en los sistemas neurológico y cardiovascular. El plomo, que entra en el organismo por inhalación, ingestión y contacto, es una toxina acumulativa y resulta especialmente peligroso para los niños y las mujeres embarazadas. El plomo también puede entrar en el agua, el aire y el suelo, y tiene efectos perjudiciales en los ecosistemas, los animales y las aves, ya que a menudo se acumula en la cadena alimentaria.
A pesar de ello, el plomo se sigue utilizando en una amplia gama de productos, desde pinturas y revestimientos hasta edificios, baterías y juguetes, en los países en desarrollo. Incluso en los países desarrollados que lo han prohibido, el plomo representa un peligro como remanente químico presente en edificios y productos antiguos.
El plomo en la pintura es una fuente importante de exposición. A menudo se añade a la pintura de interiores y exteriores que se utiliza en casas, escuelas y otros edificios, así como en muebles, parques infantiles y juguetes, para acelerar el secado, aumentar la durabilidad y mejorar las propiedades visuales.
No obstante, cada vez son más los países que se oponen a su uso.
Entre 2012 y 2023, el número de naciones con controles legalmente vinculantes sobre la pintura con plomo aumentó de 52 a 93.
La Alianza Mundial para Eliminar el Uso del Plomo en la Pintura, dirigida por el PNUMA y la Organización Mundial de la Salud (OMS), ha apoyado este cambio. La alianza ayuda a los países a legislar sobre los controles del plomo en la pintura, entre otras cosas mediante la promoción de una ley modelo en la que pueden inspirarse las naciones a la hora de elaborar normativas relacionadas con el plomo. Los equipos responsables del proyecto de reformulación de la pintura se coordinaron con la Alianza para ayudar a 21 países a promulgar leyes que limiten el uso del plomo en la pintura, mientras que otros 19 tienen pendientes proyectos de ley.
La Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), una agrupación de 15 naciones, también ha elaborado un proyecto normativo que limitaría el plomo en la pintura por debajo de 90 partes por millón. Tras su aprobación por el Consejo de Ministros de la CEDEAO en julio, la norma se remitió a sus Estados miembros para su aprobación.
"Limitando la concentración de plomo en la pintura, protegeremos el medio ambiente y a las personas, en particular a los niños y las mujeres, del cáncer y otras enfermedades", declaró (en inglés) Yao Bernard Koffi, Jefe de la División de Medio Ambiente y Cambio Climático de la Comisión de la CEDEAO.
Los defensores de acabar con el uso del plomo en la pintura se han visto alentados por la desaparición de este elemento de otro producto común: el combustible. En 2021, el uso mundial de plomo en la gasolina llegó oficialmente a su fin, como resultado de décadas de presión por parte de la Asociación para Combustibles y Vehículos Limpios, respaldada por el PNUMA. Se calcula que la eliminación progresiva del plomo del combustible salva 1,2 millones de vidas humanas al año.
Al igual que las prohibiciones de los combustibles con plomo han evitado millones de muertes y ahorrado billones a la economía mundial, las leyes sobre la pintura con plomo pueden ayudar a salvar millones de vidas más y evitar importantes gastos sanitarios y de otro tipo, afirmó Sheila Aggarwal-Khan.
El Enfoque Estratégico para la Gestión de Productos Químicos a Nivel Internacional, un marco político multisectorial voluntario, ha guiado el uso internacional de productos químicos, como el plomo, durante más de 15 años.
Esta semana se reúnen en Bonn (Alemania) diversos representantes en la Conferencia Internacional sobre Gestión de Productos Químicos (ICCM), donde negocian un nuevo acuerdo. Además de la pintura con plomo, los observadores afirman que un nuevo marco podría ayudar a resolver los problemas de salud causados por muchos otros productos que contienen plomo, como las baterías, la cerámica y las especias.
"Esta semana, la comunidad mundial se ha puesto manos a la obra para acelerar la lucha contra la crisis planetaria de la contaminación por productos químicos", declaró Sheila Aggarwal-Khan. "La gestión racional de los productos químicos y los desechos es esencial para el desarrollo sostenible y contribuye significativamente a los esfuerzos por contrarrestar la crisis climática y preservar la biodiversidad".
Mientras prosiguen las conversaciones sobre el sucesor del marco de gestión de sustancias químicas, los grupos sobre el terreno afirman que la concienciación sobre los peligros del plomo en la pintura es crucial para acabar con su uso. En Perú se llevó a cabo una campaña de sensibilización paralela al proyecto de reformulación de pinturas, en el que participaron cuatro empresas. Los promotores diseñaron una mascota llamada Pibi (la pronunciación en inglés de "Pb", el símbolo químico del plomo) que participó en actividades de sensibilización en universidades y escuelas. Eso hizo que la iniciativa fuera "más divertida para los estudiantes", aseguró Maricé Salvador, Directora del Grupo GEA - Economía Circular e Innovación, y punto focal del proyecto para eliminar el plomo de los productos en el Perú.
Esfuerzos como estos están empezando a cambiar las mentalidades, sostiene Tirado Espinoza, del fabricante de pinturas Universal Colors: "El plomo en la pintura se ha convertido en un tabú. [...] Cada vez que hablamos del proyecto a nuestros clientes, sienten que se les está educando en algo de lo que nunca habían oído hablar".
Para luchar contra el impacto generalizado de la contaminación en la sociedad, el PNUMA lanzó la campaña #SinContaminación, una estrategia de intervención rápida, coordinada y a gran escala contra la contaminación del aire, la tierra y el agua. La estrategia destaca el impacto de la contaminación en el cambio climático, la pérdida de naturaleza y biodiversidad y la salud humana. A través de mensajes basados en hallazgos científicos, la campaña muestra cómo la transición hacia un planeta libre de contaminación es vital para las generaciones futuras.
Este reportaje se ha elaborado en colaboración con el Instituto Internacional de Desarrollo Sostenible (IISD) en el marco del proyecto del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM) ID: 9771 sobre Mejores Prácticas Globales en Cuestiones de Política Química Emergentes de Interés bajo el Enfoque Estratégico para la Gestión de Productos Químicos a Nivel Internacional (SAICM). Este proyecto está financiado por el FMAM (GEF), aplicado por el PNUMA y ejecutado por la Secretaría del SAICM.