El accidente del vuelo ET 302 de Ethiopian Airlines fue una pérdida terrible para las Naciones Unidas, para nuestros Estados Miembros y para todo el sector dedicado al medio ambiente.
La comunidad ambientalista está de luto hoy. Muchos de los que perdieron la vida viajaban para brindar apoyo y participar en la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Perdimos a personal de la ONU, delegados jóvenes que viajaban a la Asamblea, científicos experimentados, miembros de la academia y otros socios.
Nos unimos al Secretario General para expresar nuestras sinceras condolencias a las familias y seres queridos de todas las víctimas que murieron en esta tragedia.
Toda la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente los honrará en sus esfuerzos de esta semana.
Las Naciones Unidas está en contacto con las autoridades etíopes y trabaja en estrecha colaboración con ellas para establecer los detalles sobre el personal que perdió la vida en esta tragedia. Estamos haciendo disposiciones para ayudar a las familias de las víctimas, brindándoles asesoramiento y movilizando cualquier otro apoyo que pueda ser necesario en este momento difícil.
