La arena desempeña un papel estratégico en la prestación de servicios ecosistémicos, infraestructuras vitales para el desarrollo económico, medios de vida en las comunidades y mantenimiento de la biodiversidad. Está vinculado a los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), directa o indirectamente. A pesar de la importancia estratégica de la arena, su extracción, suministro, uso y gestión siguen sin estar regulados en muchas partes del mundo, con muchas consecuencias medioambientales y sociales que se han pasado por alto.
En la UNEA-4, "La arena y la sostenibilidad: encontrar nuevas soluciones para la gobernanza ambiental" (PNUMA 2019) permitió concienciar sobre esta cuestión, hasta hace poco descuidada, y empezar a encontrar soluciones.
Aunque la arena es el material sólido más utilizado (50 mil millones de toneladas al año), la vigilancia mundial de la escala y el impacto de la extracción de arena sigue siendo limitada. El informe "Arena y sostenibilidad: 10 recomendaciones estratégicas para evitar una crisis" consolida, por tanto, la competencia en materia de arena y sostenibilidad de diferentes sectores para llamar la atención sobre las repercusiones del estado actual de la extracción, el uso y la (mala) gestión, proponiendo recomendaciones de actuación para establecer una agenda mundial de la arena que aborde las necesidades de sostenibilidad medioambiental, así como consideraciones de justicia, equidad, técnicas, económicas y políticas.
Este informe se basa en las recomendaciones de los expertos mundiales en este tema, recogidas a través de entrevistas, mesas redondas de expertos y aportaciones directas de más de 20 autores principales. Apoya tres resoluciones de la Asamblea de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente:
- UNEA 4, sobre la gobernanza de los recursos minerales (la arena es el material más extraído por volumen)
- UNEA 4, sobre infraestructuras sostenibles (las infraestructuras requieren arena como material de construcción).
- UNEA 5, Aspectos medioambientales de la gestión de minerales y metales (pide que se eleven nuestras normas medioambientales sobre cómo gestionamos estos recursos).
Y la moción de la UICN "Por una urgente gestión mundial de los recursos areneros marinos y costeros".
