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Índice de desperdicio de alimentos 2021

04 March 2021
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El hecho de que la cantidad de alimentos que los humanos producen pero no se comen sea significativa tiene efectos negativos igualmente significativos desde los puntos de vista social y económico, pero también ambiental: las estimaciones sugieren que entre 8% y 10% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero están asociadas con alimentos que no se consumen.

Reducir el desperdicio de alimentos en los comercios minoristas, los servicios de alimentos y el hogar puede brindar beneficios multifacéticos tanto para las personas como para el planeta. Sin embargo, la verdadera magnitud del desperdicio de alimentos y sus efectos no se habían entendido bien hasta ahora. Por ello, las oportunidades que podría brindar la reducción del desperdicio de alimentos prácticamente no se han explorado ni se han explotado lo suficiente.

Si queremos tomarnos en serio la lucha contra el desperdicio de alimentos, debemos aumentar los esfuerzos para medir los alimentos y las partes no comestibles que se desperdician al nivel de los minoristas y del consumidor y realizar un seguimiento de la generación de desperdicio de alimentos en kilogramos per cápita y por país. Solamente con datos confiables podremos seguir el progreso de la meta 12.3 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que tiene como objetivo reducir a la mitad el desperdicio de alimentos mundial per cápita a nivel de los minoristas y del consumidor y reducir las pérdidas de alimentos a lo largo de las cadenas de producción y suministro, incluidas las pérdidas poscosecha.

El Informe sobre el Índice de desperdicio de alimentos busca servir de apoyo a la meta 12.3 al presentar la recopilación, el análisis y el modelo de datos sobre el desperdicio de alimentos más completos hasta la fecha. Asimismo, el informe ofrece una nueva estimación del desperdicio de alimentos a nivel mundial y una metodología para que los países puedan medir el desperdicio de alimentos a nivel doméstico, de los servicios de alimentos y de los minoristas, para poder hacer un seguimiento del progreso nacional hacia 2030 e informar sobre los avances en el ODS 12.3.

Los países que utilicen esta metodología generarán pruebas sólidas para orientar una estrategia nacional sobre la prevención del desperdicio de alimentos que sea lo suficientemente sensible para detectar cambios en intervalos de dos o cuatro años, y que permita hacer comparaciones significativas entre países a nivel mundial.